CASLEO: Complejo Astronómico El Leoncito

El Complejo Astronómico El Leoncito (CAsLeo) se localiza en el departamento de Calingasta,  provincia de San Juan, a unos 40 kilómetros de la localidad de Barreal, dentro del Parque Nacional El Leoncito. Fue formalmente creado en mayo de 1983, siendo su instrumento principal el telescopio reflector de 215 centímetros de diámetro que lleva el nombre del precursor de la idea del CAsLeo, Jorge Sahade. El telescopio fue aportado por la Universidad Nacional de La Plata, siendo inaugurado  el 12 de septiembre de 1986.

El emplazamiento del telescopio se encuentra a 2552 metros de altura sobre el nivel del mar, con la cadena montañosa del Tontal hacia el norte, la que separa el complejo de la ciudad de San Juan. Nuestro recorrido nos llevó desde la ciudad de San Juan hacia el norte por la Ruta 40 y luego hacia el sur, pasando por Calingasta y Barreal. Los paisajes naturales que enmarcan el trayecto son de gran belleza, con formaciones geológicas muy variadas donde resaltan sus diferentes colores, en ocasiones contrastados por verdes valles, con las altas cumbres de la Cordillera de los Andes como un impresionante fondo ocasional.

CAsLeo - Foto: Enzo De Bernardini

Para llegar a El Leoncito podremos movilizarnos en nuestro propio vehículo o contratar un guía especializado en la zona. Cada opción tiene sus propias ventajas. En esta oportunidad fue Raúl Vargas, nuestro guía, quien nos llevó hasta el parque mostrándonos durante el viaje las bellezas naturales de la zona y haciendo detenciones en los sitios de mayor interés.

Al acercarnos, un cartel indicativo nos anuncia que estamos entrando al Parque Nacional El Leoncito. El último tramo del recorrido es en gran medida hacia arriba, ganando altura en cada momento. La esperada cúpula se deja ver a lo lejos, pequeña y brillante. El sendero dentro del parque posee una espléndida arboleda lateral, muy agradable teniendo en cuenta el fuerte sol de la zona.

Residencia para Astrónomos - Foto: Enzo De Bernardini

El complejo cuenta con dormitorios para el personal y visitantes, residencia para astrónomos y comedor, entre otros edificios. Gracias a estas instalaciones, los visitantes tienen la posibilidad de no solo hacer una excursión diurna al parque, sino también de pasar la noche en el mismo complejo realizando observaciones astronómicas guiadas con un telescopio de gran apertura especialmente dispuesto a tal fin justo a un lado de la gran cúpula, disfrutando de los cielos sede del complejo astronómico más importante de Argentina.

Dentro del mismo complejo se encuentra el Telescopio Solar Submilimétrico (SST), un radiotelescopio instalado en El Leoncito gracias a un acuerdo con el Centro Radioastronómico y Astrofísico de Mackenzie en Sao Pablo (CRAAM), la Universidad de Campiñas (Brasil), el CAsLeo y el Instituto de Astronomía y Física del Espacio (IAFE, Argentina). Su objetivo principal es el de realizar observaciones en frecuencias de 200 y 400 Ghz de los eventos que se producen en la superficie del Sol.

En el cerro Burek, vecino al complejo, y mediante un acuerdo con el observatorio David Dunlap de la Universidad de Toronto, el telescopio Helen Sawyer Hogg (HSH) de 60 centímetros de diámetro se encuentra dedicado a la fotometría y espectroscopía. Su cúpula es bien visible desde las cercanías de la cúpula principal del CAsLeo.

Nuestra visita comienza a las 17 horas, con el sol aún alto sobre el horizonte. Celina Brizuela, nuestra guía, nos comenta varias características del emplazamiento antes de iniciar el recorrido por el edificio principal.

Al ingresar al nivel inferior nuestra primer parada nos lleva a conocer la cámara de vacío utilizada para aluminizar el espejo del telescopio, una máquina grande, de forma bastante esférica y de un distinguido color naranja. Cada cierto tiempo el aluminio que recubre la superficie del espejo es retirado, dejando el vidrio limpio al descubierto. Luego se ingresa la pieza completa al aparato, se crea un vacío y una nueva capa de reflectante aluminio es depositada sobre la gran pieza de vidrio de 1315 kilogramos de peso.

En ese mismo nivel, a un lado, podremos ver también una pequeña exposición ilustrada con imágenes del procedimiento, así como mapas satelitales de que nos posicionaran en la zona del complejo.

En nuestra segunda detención en el recorrido veremos la estructura que sostiene al telescopio que se encuentra en un nivel superior. Es muy grande y robusta, emplazada de forma independiente del resto del edificio y directamente sobre la roca madre de la montaña. Una pieza fundamental para la correcta puesta en estación del gran telescopio. Por ser San Juan una zona sísmica, eventualmente son necesarias pequeñas correcciones a la gran estructura. Grandes tuercas en tres puntos permiten estas tareas.

Siguiendo con la visita, pasamos a la sala de control del telescopio, el lugar desde donde se realizan las observaciones. Varios instrumentos, computadoras y pantallas pueden verse a un lado, con una pequeña biblioteca hacia el fondo. Algunas pantallas muestran elementos reconocibles, como un gráfico del contorno de la cúpula con su abertura o algunas coordenadas ecuatoriales celestes (ascensión recta y declinación). Más tarde tendríamos la oportunidad de ver todo el trabajo de esta sala en acción.

Ahora subimos al nivel superior donde vemos a la estrella del complejo: el telescopio Jorge Sahade, un reflector tipo Ritchey-Chrètien de 2153 milímetros de diámetro, ubicado dentro de la gran cúpula, el sello distintivo del CAsLeo. En ese momento se encontraba apuntando hacia el cenit, con su espejo tapado por secciones triangulares para proteger a los sensibles instrumentos de cualquier luz indeseada. Luego, al momento de las observaciones, se abren como pétalos y dejan ver la luz de las estrellas y otros objetivos apuntados.

El espejo secundario posee 65 centímetros de diámetro, un peso de 72 kilogramos y se encuentra dispuesto en lo alto de la estructura del telescopio. Todo el instrumento pesa 40 toneladas y se mueve con gran precisión contrarrestando el movimiento de rotación de la Tierra. Varios instrumentos y gran cantidad de cables se ven saliendo de la parte inferior del telescopio, donde se encuentra el foco, justo por debajo del espejo primario.

Telescopio Jorge Sahade - Foto: Enzo De Bernardini

Dentro de la cúpula puede verse el sistema que abre el gajo para las observaciones, estructuras metálicas similares a plataformas y la pantalla blanca utilizada para tomar flat fields de calibración para ciertas mediciones. Es sin duda el punto cúlmine de la visita diurna, el ícono de todo observatorio astronómico y un momento para recordar.

Terminando el recorrido pasamos a una sala donde podremos firmar el libro de visitas y adquirir algún recuerdo de nuestro paso por el CAsLeo. Hay para elegir algunas pequeñas publicaciones impresas, remeras y lapiceras entre otros.

Para los visitantes que se queden a pasar la noche ahora tendrán unas horas libres hasta la cena, ideales para recorrer a pié los alrededores, tomar fotografías al atardecer y descansar en las habitaciones esperando la noche.

Cada habitación tiene capacidad para dos personas y posee todo lo necesario para una estadía confortable, incluyendo calefacción, agua caliente e internet inalámbrica. Son muy nuevas, agradables y bien cuidadas.

La cena se sirve cerca de las 21 horas, es casera, dedicada y abundante. La cocinera ha recibido más de una felicitación por su labor.

Después de cenar comienzan las observaciones. Nuestra guía nocturna, Nancy Salas, tiene listo el telescopio Schmidt-Cassegrain de 14" con goto para el recorrido del cielo. Aunque nuestra noche en particular no fue muy favorable (algo de Luna y algo de nubosidad) pudimos observar varios objetos interesantes, por ejemplo, el Homunculus de eta Carinae con una excelente definición.

Siguiendo con la noche tuvimos la oportunidad especial de ingresar a la sala de control del telescopio en plenas labores observacionales. Allí nos recibieron el ingeniero en electrónica Arnaldo Casagrande, jefe de turno en la estación y Antonio De Franceschi, operador del telescopio y colaborador de turno para los astrónomos. Amablemente nos explicaron el funcionamiento del instrumental y detalles de las actividades observacionales, pudiendo ver el espectrógrafo de banco, un magnífico instrumento construido por el Ing. Casagrande en el CAsLeo. La luz capturada por el telescopio es transmitida por fibra óptica hasta el espectrógrafo, ubicado en un nivel inferior. Esta luz es descompuesta por dos redes de difracción en su recorrido a través del instrumento, para terminar siendo registrada en forma de espectro en un detector CCD el final del trayecto.

Ing. Arnaldo Casagrande - Foto: Enzo De Bernardini

Arnaldo Casagrande, Nancy Salas, Antonio De Franceschi, Rodolfo Ferraiuolo, Yanina Ulloa, Enzo De Bernardini - Foto: Enzo De Bernardini

Sur Astronómico en el CAsLeo - Foto: Enzo De Bernardini

Terminada la noche y habiendo dormido algunas horas pudimos ver el amanecer en El Leoncito, con las montañas de la Cordillera de los Andes iluminadas por la luz del Sol naciente del lado opuesto. Luego de tomar nuestro desayuno emprendimos el regreso hacia la ciudad de San Juan,  llevándonos con nosotros la gran experiencia de haber conocido el centro astronómico más importante de Argentina, un sitio espléndido emplazado en un marco natural espectacular.

Vista Nocturna en El Leoncito - Foto: Enzo De Bernardini

Amanecer en El Leoncito - Foto: Enzo De Bernardini